El sábado 11 de noviembre de 1989, un día como hoy hace 28 años, el FMLN lanzó su ofensiva final. La llamaron “Hasta el Tope”, porque su objetivo fue irse con todo hasta la toma del poder.
En ese entonces yo tenía 29 años de edad y era jefe de la Sección de Cripto-Análisis de la Dirección Nacional de Inteligencia (“DNI”). Comenzando seis días antes de la Ofensiva, algunos de los oficiales de la DNI comprendimos la naturaleza y la magnitud de lo que estaba por ocurrir. Hicimos nuestros mejores esfuerzos por informar al Mando. Aún así, la Ofensiva tomó casi por sorpresa a la Fuerza Armada y al Gobierno de la República, y tomó por completa sorpresa a la población civil. Pero la valentía y sacrificio de nuestros soldados, aunada a la falta de respaldo de la población civil a la Ofensiva, impidieron que el FMLN se tomara el poder por la vía de las armas.
Después de la Ofensiva, el General (entonces Coronel) René Emilio Ponce, Jefe del Estado Mayor Conjunto de la Fuerza Armada, me llamó al Estado Mayor y me pidió que le presentara un informe de carácter personal sobre la Ofensiva, incluyendo cualquier crítica que yo considerara pertinente. Para ese entonces yo ya estaba designado para viajar a Washington a reforzar el trabajo de la Embajada de El Salvador, donde estuve asignado durante los siguientes cuatro años. Es de reconocer que el General Ponce tuviera a bien solicitar mis comentarios personales en esa y otras ocasiones posteriores, ofreciéndome completa libertad de expresión, de la cual hice uso con el debido respeto.
En este aniversario de la Ofensiva del 11 de noviembre de 1989, comparto una copia del documento que entregué al General Ponce, como un saludo al pueblo salvadoreño, a los veteranos de la Fuerza Armada y especialmente a quienes ofrendaron sus vidas en el cumplimiento del deber. Espero que la lectura de este documento contribuya a conocer mejor nuestro pasado y que ese conocimiento nos ayude a construir juntos un mejor futuro para El Salvador.
Un abrazo y que Dios los bendiga a todos.